Mostrando entradas con la etiqueta Viajes. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Viajes. Mostrar todas las entradas

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Guía rápida de Verona


Verona tiene una luz especial. Así como Sevilla su color.
  • Te puedes perder por sus calles.
  • Tomarte un vino en la vía Sottoriva (si es un spritz aperol, mejor)
  • Subir las escaleras de la Torre Lamberti y no sentir las piernas.
  • Pasear por la orilla del Río Adige y el Ponte Pietra.
  • Visitar muchas iglesias, la mejor, San Zenón, románica y apartada del ruido de la ciudad.
  • Pasear por sus caras boutiques y gastarte un dineral en un jersey para el frío (o buscar una tienda barata para lo mismo, que aunque pocas, las hay).
  • Visitar la famosa casa de Julieta y ver a sus guardias de seguridad dormidos en las sillas.
  • Darte una vuelta por el mercadillo de la Piazza dell Erbe.
  • Entrar en el anfiteatro Arena de La Piazza Bra o en el teatro romano.
  • Subir al Castel San Pietro para ver el atardecer sobre Verona (no tiene desperdicio, creo que es lo más recomendable de todo).
  • Visitar la Galería de Arte Moderna (Palzzo Forti) y El Museo de Fotografía.
  • Si andas justo de dinero, comer con vistas al río los croissants rellenos del desayuno y fruta.
  • Subir a Castelvecchio y... sus vistas.
  • Tomarte un café en el Bar Retro, al lado del Duomo, o un chocolate caliente en el Bar Art Gallery.
  • Comprarte una guía de la ciudad por 5 euros.
  • Comerte unas pizzas y unos calzone de escándalo.
  • Sentarte en una terracita en alguna de las tres plazas al sol.
  • Caminar a todos lados y aprovechar al máximo la Verona Card que cuesta 15 euros y merece la pena no sabéis cómo.
  • Recomendar el Hotel Valverde: buen trato, buen desayuno, aunque el baño es demasiado pequeño.
  • Reírte mucho, no perderte porque es imposible, aprender de arte, comer, beber, pasear... intentar ir en plan slow travel y no conseguirlo.
  • Ver la tumba de Julieta (que da muy mal rollo, la verdad).
Todo eso puedes hacer en Verona. Mejor, si no hace frío.


martes, 23 de agosto de 2011

Córdoba, la casa de todos

6 de septiembre. Martes. 9 de la mañana. Estaré entrando por las puertas de la UNED para examinarme de la asignatura "Historia del Arte en la Antigua Edad Media". Es decir, período que abarca desde el arte paleocristiano, pasando por el arte de las invasiones, arte musulmán de los omeyas (y más) hasta el románico. Casi nada.

Pero estaba yo dándole vueltas al tema 6, titulado nada más y nada menos que "la crisis del califato abasí y su repercusión en el arte islámico" cuando he recordado un viaje a Córdoba que hicimos el año pasado. Viaje a Córdoba en mayo= calor, salmorejo y Mezquita.

Y de la Mezquita de Córdoba os voy a hablar (pero poco, por no aburrir). Resulta que se llevó a cabo en distintas fases y ampliaciones entre los siglos VII y XI por obra de Abd al-Rahman I, Abd al-Rahman III, Al-Hakam II y Al-Mansur (primer ministro de Hixem II). No quiero entrar en detalles técnicos, sólo comentar el sistema de arquerías de doble arco (de herradura los inferiores y de medio punto los superiores) rojos y blancos tan característicos (véase la foto) en primer lugar.

Y en segundo lugar, la ampliación de Al-Hakam II que consiguió esta maravilla: el acceso al mihrab, lugar donde deben mirar los que oran y donde se alberga el Corán:


Y tiene muchas más cosas pero para mí, estas dos son las principales. Overwhelming es la palabra que se me viene a la mente para describirla. Vamos, una pijada de palabra pero así es. La invasión árabe en España sería lo que queráis pero dejaron algunas maravillas que ni los reyes posteriores quisieron destruir porque se quedaron alucinando, hablando claro (como pasó también con la Alhambra de Granada). Y eso que la mezquita está construida a partir de la basílica visigótica de San Vicente, expropiada a los cristianos y destruida para construirla. Años más tarde se convertiría en una catedral, pero conserva su encanto y su belleza árabe (menos mal).

23.400 metros cuadrados de mezquita, consiguió ser la segunda más grande del mundo, después de la de de La Meca.

Os aconsejo mucho ir a Córdoba y disfrutarla. La mezquita y los demás encantos que la ciudad ofrece :)


(Fotos mías y de Javi, que a falta de Flickr, bueno es Twitter)

martes, 26 de julio de 2011

Dos viajes muy difíciles de olvidar

Después de más de un mes fuera vuelvo para contaros mis peripecias. Resumidas, claro, no puedo contar todo lo que he visto y oído en 12 días en Honduras y 17 en Bolivia porque nos volveríamos locos. Pero puedo intentar que os hagáis una idea.

Honduras.

15 de junio. 35 grados centígrados y 85% de humedad relativa. Según salgo del aeropuerto empiezo a sudar y se me pega la ropa al cuerpo. Llueve, pero no importa porque el cansancio nos puede.

Primero visitamos Morazán y el Hogar Materno en el cual las mujeres que viven en zonas rurales muy alejadas descansan los días antes de dar a luz. Tuvimos la suerte de entrevistar a las chicas que allí se alojaban (eran todas chicas jóvenes, la más mayor de 23 años, que iba a dar a luz a su segundo hijo) y que nos contaran sus experiencias, inquietudes y que les gustaría seguir estudiando donde lo dejaron.

Entrevista a una de las beneficiarias del hogar materno infantil

También visitamos la Bahía de Tela y a las comunidades garífunas de Tornabé, San Juan, Miami y Triunfo de la Cruz. Descubrimos este pedacito de África bañado por el caluroso mar Caribe, sus playas vírgenes, su gente -tan abierta y alegre-, sus costumbres, comimos machuca con sopa de pescado y entrevistamos a jóvenes, doctores y las responsables del centro Natalie Johnsson de afectados e infectados por el virus VIH/Sida. Alegres, ante todo alegres. Los niños sonríen la situación que les ha tocado vivir. Todo de la mano de ENMUNEH (Enlace de mujeres negras de Honduras).

Niña en el centro Natalie Johnsson para afectados e infectados de VIH/Sida

De allí nos fuimos a Ceiba, la tercera ciudad más grande de Honduras. Estuvimos en todo momento arropados por el personal de la Casa Ixchel, casa refugio para mujeres en grave peligro por violencia doméstica. Pudimos hablar con ellas, con las capacitadoras voluntarias de las comunidades en temas de violencia doméstica, VIH/Sida y embarazos en adolescentes. Tuvimos la suerte de conocer a esas mujeres que se han hecho un poquito más fuertes y autosuficientes durante su estancia en la Casa Ixchel; de charlar con afectados de VIH y cómo viven su situación en Honduras, pasando por los estigmas, la discriminación y los peligros, y de que el doctor Sergio Flores, director del Centro de Atención Integral para pacientes con VIH compartiera su visión de la educación con nosotros; así como comprobar hasta qué punto los jóvenes hondureños están sensibilizados y solidarizados con la situación de su país.

Vistas de las calles de Ceiba

Bolivia.

1 grado. El frío se nos mete en los huesos y no quiere salir, pero se olvida cuando bajamos desde el aeropuerto de El Alto hasta La Paz viendo cómo ha crecido una ciudad en las laderas de una montaña. La Paz, siempre vigilada por el Illimani, nos envuelve. El soroche nos da dolor de cabeza pero todo se atenúa un poco con los cuidados de David Lanza (siempre gracias por su trato), ibuprofenos y mate de coca. Comienza nuestra aventura.

Vistas de La Paz desde la carretera que baja de El Alto

Visitamos el Lago Titicaca y la Isla del Sol en un viaje en el que conseguimos entrar 7 personas en un taxi normal, es decir, de 5 plazas. Las vistas son impresionantes, y más al atardecer. No se ve el fin, es como si nos encontráramos ante un océano en lugar de un lago, lago que acaba en Perú.

El Lago Titicaca

Visitamos los proyectos de medicusmundi madrid en la zona del Beni (Rurrenabaque), cómo se ha conseguido llevar agua a las comunidades más alejadas y se han podido construir letrinas en las escuelas; conocimos la selva amazónica en Madidi y comprobamos que los hebreos estaban por todas partes.

Posta de Salud de Ratije

Volvimos a La Paz para perdernos en sus calles e intentar sobrevivir al tráfico infernal amenizado por personas disfrazadas de cebra que enseñan a cruzar las calles.

Cebras que te enseñan a cruzar en La Paz

Visitamos la ciudad colonial de Potosí, la Casa de la Moneda y las minas de Cerro Rico, en explotación desde 1651, cuyos mineros tienen una esperanza de vida de 35 años y mascan coca sin parar, a 45 grados en el interior de la mina.

Una cholita con pollera (vestimenta típica)

Nos asombramos con el Salar de Uyuni: no hay palabras que lo describan - mejor una foto-. Y nos volvimos cargados de artesanía e historias, unas graciosas, otras no tanto y de experiencias que los bolivianos (austeros, amables y honrados) han querido compartir con nosotros.

El Salar de Uyuni

Dos viajes de los que merece la pena el cansancio, las caminatas, el calor o el frío, las horas de viaje en coches demasiado pequeños o con poco espacio. Porque las experiencias y el intercambio, no tienen precio.

martes, 14 de junio de 2011

Salimos para Honduras


Mañana es el día. Y cómo se pasa el tiempo. Más rápido se va a pasar allí...

Mañana a las 11 saldrá un avión hacia Honduras. Bueno, en realidad hacia Miami que es donde haremos escala. Y luego otro hasta San Pedro Sula. Grabaremos un vídeo que se distribuirá entre los institutos de la Comunidad de Madrid con el objetivo de sensibilizar a los jóvenes sobre la realidad de la salud sexual y reproductiva en el país. Os cuento un poco el itinerario y qué vamos a hacer allí:

- Llegamos a San Pedro Sula y los dos primeros días los pasaremos en El Progreso y Morazán, donde visitaremos un hogar materno-infantil donde acogen a mujeres que acaban de dar a luz unos días.

- Luego nos trasladaremos a la Bahía de Tela, en la costa norte del país. Allí esteremos cinco días y visitaremos una casa de acogida y capacitación para personas seropositivas y otro hogar materno infantil. También podremos grabar los grupos de trabajo de la zona, los responsables del proyecto, un grupo de teatro y un programa de radio llevado por voluntarias.

- Como última escala pasaremos cuatro días en La Ceiba, también en la costa norte del país, donde visitaremos la Casa Itxel, casa de acogida para mujeres maltratadas.

Estamos dispuestos a encontrarnos muchos imprevistos y otros cuantos imponderables. Es normal. Va a llover, hará mucho calor y mucha humedad pero espero volver con muchas historias en la maleta y mucha conciencia y sensibilización para compartir :)

¡Hasta dentro de dos semanas!


La foto es de una visita de medicusmundi madrid a Yoro, en Honduras, para el seguimiento de un proyecto de capacitación de personal sanitario y atención integral a niños.

jueves, 2 de junio de 2011

Viaje a Honduras y Bolivia I: los preparativos del botiquín

Aquí estoy, a 15 días escasos (más bien 14), de volar lejos. Muy lejos. En concreto a Honduras primero. Luego volveré a España para vegetar un par de días o tres y luego irme de nuevo, ésta vez a Bolivia. Esto lo haré en un poco más de un mes: del 15 al 27 de junio Honduras, y del 2 al 18 de julio, Bolivia.

¿Qué voya hacer allí? En Honduras, grabar un video sobre salud sexual y reproductiva en la zona norte del país, donde se encuentra la etnia garífuna; hablaremos de embarazos, violencia de género y de VIH. Me voy con mi compañera de proyectos de medicusmundi y un cámara man.

En Bolivia iré acompañando a cuatro jóvenes madrileños (o que estudian en Madrid) ganadores de un concurso a conocer nuestra experiencia de cooperación en el país (bueno, la de medicusmundi) y hacer un poco de turismo: La Paz, Potosí, Rurrenabaque, Madidi, el Salar de Uyuni (en el cual espero no morir congelada...), y lo que dé tiempo. Llegaremos a La Paz después de 12 horas de vuelo hasta Santa Cruz, una escala de 4 horas y otro vuelo de 1 hora de Santa Cruz a La Paz. Bendito sea el Señor. A las 9 de la mañana, para más información. ¿Aguantaremos todo el día con el jet lag y la adecuación al mal de altura? Misterio.

Y a lo que voy, después de un mes informándome, pidiendo consejos, viendo quién me puede dejar qué, comprándome una guía que después devolví para comprarme una Rough Guide (bastante recomendable, pero en inglés), vacunándome no una, si no TRES veces en el hospital Carlos III (tifus, hepatitis A y fiebre amarilla) y, encima, de exámenes, hoy he dado el primer paso en firme (después de comprar los billetes claro, que es esencial): Ir a la farmacia a por el botiquín. Léase:

- Malarone (profilaxis para la malaria que me tendré que tomar durante los dos viajes).
- Crema solar y cacao.
- Esparadrapo, vendas y tiritas.
- Betadine.
- Antibiótico para la diarrea.
- Ibuprofeno y paracetamol (esencial para mis dolores de cabeza).
- Tijeras.
- Suero.
- Relec repelente de mosquitos.
- Labocane para las picaduras.
- Tapones (no pueden faltar en ninguno de mis viajes).

Y creo que no me dejo nada. Lo que me he dejado ha sido la pasta en la farmacia, tranquilamente. Todo sea por llegar sana y entera el 20 de julio a Madrid. Aunque bueno, el primer paso es llegar sana y entera el 27 de Honduras, y luego ya veremos.

Os iré contando cómo van los preparativos (espero) y cada uno de los viajes (eso seguro).


Foto de Bolivia, en uno de los viajes de seguimiento del proyecto en Villa el Carmen.

sábado, 2 de mayo de 2009

About Dubai


Tengo en la retina una ciudad del futuro, fantasma, donde la gente no pasea por la calle y los coches son el único medio de transporte (hay dos millones de habitantes y cinco millones de coches). También una ciudad en construcción, una ciudad que ha ganado terreno donde no lo había a base de emplear paquistaníes e hindúes que trabajan de sol a sol por 200 dólares al mes pero eso, al menos, les salva de la miseria de su país.

Tengo en la cabeza cómo idolatrar a un jeque que al ver que en 20 años se queda sin petróleo necesita construir el rascacielos más grande del mundo, el centro comercial más grande del mundo, el hotel más caro del mundo… dando privilegios a sus nativos (que sólo son el 15% de la población de Dubai) tales como una casa a modo de ajuar. Esos mismos nativos que siguen ninguneando a las mujeres, pero encima, debemos dar las gracias porque hace 20 años, cuando allí sólo había desierto, no podían ni siquiera hablar en público.

Tengo en la cabeza toda la información recogida para que no se olvide. Que no se olvide que Dubai es un emirato árabe rico, donde se vive bien, no se pagan impuestos y las autovías tienen no menos de seis carriles en cada sentido. Donde las mujeres llevan túnicas y velos negros de Versace y se meten a la piscina con ropa (sólo las más atrevidas) mientras caminan al lado de su hombre que enseña todo ese cuerpo que ella se tapa, y muy orgulloso de ello.

Tengo el desierto y su luz en el fondo de mis ojos para que no se marche, le haré un hueco todas las noches y veré la puesta de sol desde las dunas vestida de beduina en tonos rosas verdes y naranjas. Así que si alguien me quiere acompañar os dejo la puerta abierta.

domingo, 12 de abril de 2009

Entre coffee shops y bicicletas



















Se nos dormían los pies, nos pesaban los brazos y las risas fueron nuestras mejores amigas.

Nos quedó pendiente alquilar una bicicleta y comernos unas patatas fritas (hubo que cambiarlas por una creme brulee).

Tuvimos compañeros pesados de avión, comimos mucho, fumamos más y andamos lo que no está escrito (incluso para volver a sitios a los que ya habíamos estado, sólo por antojo de ver).

Y, sobre todo, nos perdimos (Amsterdam está mal construída que lo sé yo).